Aún hoy en día hay muchas personas que creen que este material de construcción es poco recomendable para hacer una reforma debido a que no ofrece resistencia y resulta poco duradero. Nada más lejos de la realidad. Como nos informan desde Carmoplac, almacenistas de pladur en Sevilla, ocurre todo lo contrario, por lo que cada vez más empresas de reformas y de decoración recurren a este material para realizar obras en el menor tiempo posible.
Principales ventajas del pladur
El pladur, conocido así aunque no es su nombre oficial sino el de una de sus marcas fabricantes, se trata de un material compuesto por dos placas de yeso laminado con un interior de cartón. Por tal motivo, en el sector se conoce como placas de yeso laminado, que ofrecen, por un lado, una gran capacidad de resistencia a la comprensión, y por otro, una importante flexibilidad.
Sin duda, estamos ante un material muy polivalente que ofrece muchas ventajas. Entre otras, destacaremos:
– Multiuso: puede emplearse tanto para formar techos, como para separar en tabiques el interior de una vivienda o fabricar muebles completamente personalizados. Nuestros expertos en pladur en Sevilla inciden especialmente en esta última opción como un buen recurso para decoración.
– Fácil instalación: su colocación es relativamente sencilla, aunque no se trata de disponer la placa sin más, no. Para una instalación profesional hay que colocar primero una estructura metálica que debe recubrirse por ambas caras con placas de yeso laminado. En ese espacio interior que resulta, pueden colocarse las diversas instalaciones que sean necesarias, como cables de electricidad o tuberías de fontanería.
– No genera apenas residuos: ¿os imagináis la cantidad de suciedad que genera una obra como levantar un simple tabique? Pues eso no tiene nada que ver con las resultantes en un tabique de pladur, principalmente debido a que su montaje se hace en seco.
¿Pladur en la cocina?
Aunque pueda parecer una quimera, cada vez más empresas de reformas y profesionales autónomos utilizan este material versátil para reformas en cocinas, sobre todo, en clientes que demandan reformas rápidas, económicas y sencillas.
Gracias al pladur se pueden crear techos igual de resistentes, o incluso más, que los de escayola tradicional. Además, permiten crear un nuevo techo falso por donde colocar instalaciones como cables o tuberías.
También permite contar con paredes nuevas sin necesidad de derribar las antiguas. Además, hoy en el mercado existen modelos de placas especialmente tratadas para aislar los espacios tanto de la humedad como del ruido (muy recomendable si se trata de una cocina industrial). Incluso, su interior se puede «rellenar» con materiales específicos como lana de roca que contribuyen a aumentar las propiedades de aislamiento.
Asimismo, el pladur es bastante práctico para separar esta estancia, si se trata de cocinas grandes, con tabiques para, por ejemplo, crear un espacio para comedor o una alacena.
Por último, también pueden realizarse muebles y estanterías de pladur, muy útiles para solucionar problemas de espacio.