En la mayoría de los proyectos de reformas integrales que afrontamos desde la división de arquitectura de Grupo Addu, los clientes nos piden integrar la cocina dentro del salón, ya que es una de las tendencias de decoración que en los últimos años ha conseguido un enorme terreno. No obstante, muchos no han valorado convenientemente las ventajas y los inconvenientes de esta modificación, sino que se dejan llevar por la moda.

Hay empresas de mantenimiento de cocinas que afirman que las cocinas “americanas” se han impuesto frente a las tradicionales por la influencia de programas de televisión de gastronomía que han difundido la imagen de una cocina ideal con una isla central en su centro. Lógicamente, para ello, debe contarse con el espacio suficiente, porque el resultado no va a ser el esperado. También hay que considerar otros aspectos, como el cambio de hábitos y de la rutina diaria, donde apenas hay tiempo para cocinar con la tranquilidad suficiente.

Hoy en día se buscan cocinas grandes, donde no solo se puedan preparar los alimentos, sino que se puedan realizar otras actividades como desayunar, almorzar, cenar, lavar la ropa e incluso plancharla. Es decir, apenas se usa ya la mesa de comedor, tan presente en décadas pasadas, salvo para las grandes celebraciones puntuales de navidad, cumpleaños, etc. En definitiva, la cocina es ya el espacio donde se hace más vida de toda la vivienda.

Más espacio, principal ventaja

A continuación vamos a analizar las ventajas que tienen las cocinas americanas para el diseño de la vivienda. Lógicamente, hay que tener en cuenta el tamaño disponible y, por supuesto, el número de componentes.

El salón recobra importancia: al aprovechar la cocina para hacer las comidas diarias, se puede apostar por una mesa mayor para el salón donde mantener veladas agradables con invitados y familiares. Colocarla junto a la cocina es muy buena opción para no tener que hacer grandes trayectos.

Aprovecha el espacio de la puerta: al no existir ya puerta de acceso en la cocina, dicho espacio se puede aprovechar para colocar más muebles o algún que otro electrodoméstico de un mayor tamaño al habitual. Además, si ese espacio te sirve para colocar una isla dentro de tu cocina, podrás soltar sobre ella las bolsas de la compra cómodamente.

Más ganas de cocinar: aunque parezca mentira, la cocina abierta al salón te dará más ganas de cocinar porque no te sentirás tan aislado del resto de la vivienda. Así, podrás mantener conversación con alguien que esté sentado en el sofá viendo la tele o seguir tu serie favorita mientras preparas alguna elaboración.

Un aspecto más moderno: una cocina americana dará un aspecto vanguardista a tu vivienda, pues es un recurso decorativo que no existía hasta hace unos años. Eso sí, las tareas para el mantenimiento de cocina serán prácticamente las mismas.

Amplitud visual y más luz: en aquellas viviendas con pocos puntos de luz al exterior, cuantas menos paredes existan, mucho mejor. Eliminar la mayoría de los tabiques en la cocina, sobre todo en aquellas que no tienen salida al exterior, es casi imprescindible.

Un nuevo lugar para conversar: como ya hemos señalado, ahora podrás recibir tus visitas de forma original en la cocina y disfrutar de un pequeño piscolabis en este lugar.

Las cocinas americanas también tienen inconvenientes

Pérdida de intimidad: al desaparecer los tabiques, ahora todo el mundo podrá verte mientras estás cocinando. Si eres una persona muy celosa de tu intimidad y no quieres que tus visitas vean cómo prepara los platos con los que las vas a agasajar, mejor no coloques en tu casa una cocina abierta al salón.

Mayor ruido: los sonidos (y los olores) de tu cocina se distribuirán por toda la casa, a menos que tengas un buen extractor hacia el exterior. De igual forma, los ruidos del salón se podrán escuchar desde la cocina (televisión, radio, etc.). Si te gusta cocinar tranquilo tenlo en cuenta.

Nuevos hábitos: piensa que si desde la entrada de la vivienda se va a poder ver la cocina, tendrás que tenerla bien ordenada si quieres dar una buena imagen a tus visitas. ¡Olvídate de dejar los cacharros y utensilios de cocina usados en el fregadero!